
Como seguramente habréis notado, las conversaciones en torno a la menstruación han cambiado tremendamente en los últimos años, haciendo que por fin la vivamos de una manera más natural, abierta y positiva. =)
Lamentablemente, esto no nos libra de sus incómodos síntomas. Cambios de humor, hinchazón, acné, insomnio, dolor de cabeza y dolor abdominal son síntomas que todas hemos sufrido, en mayor o menor medida. En los peores casos, estos pueden condicionar tremendamente nuestra vida y hacernos romper con nuestra rutina diaria.
LOS SÍNTOMAS
Unos días antes del sangrado, las mujeres empezamos a notar una serie de cambios físicos y emocionales. Tanto la duración como la intensidad de éstos son variables y dependen de cada una. A nivel emocional se puede experimentar cansancio, tristeza, ansiedad o irritabilidad, síntomas que engloban el llamado síndrome premenstrual.
Entre las alteraciones físicas está el dolor, generalmente de tipo calambre, en la zona baja del abdomen y, a veces, en las lumbares en incluso en los muslos. También son comunes náuseas y vómitos, diarrea, hinchazón o dolor de cabeza.
La gran mayoría de mujeres hemos tenido menstruaciones dolorosas o molestas en algún momento de nuestra vida. Las mujeres con endometriosis son las que describen el dolor más fuerte. Hasta un 10 % de las mujeres sufren síntomas tan intensos que ven condicionada su vida normal, convirtiéndose en una de las principales causas de absentismo escolar y laboral. (1) En muchos casos, se hace imprescindible recurrir a algún medicamento y muchas de nosotras ya los habíamos incorporado en nuestro botiquín esencial sin el cual nos era imposible salir de casa.
Para las que nos resistimos a tomar fármacos durante varios días seguidos porque no queremos o porque directamente no nos sientan bien, siempre hemos estado abiertas a incorporar otros métodos en nuestra rutina, que además de hacernos más llevaderos los días de la menstruación, nos pueden servir para llevar una vida más sana y a encontrarnos mejor con nosotras mismas. ¿Has probado a cambiar tu dieta, hacer ejercicio físico o practicar yoga?
Si eres de las que te gustan las alternativas naturales a los medicamentos tradicionales, habrás escuchado que el CBD está ganando cada vez más adeptas, sobre todo cuando es consumido en forma de aceite.
¿PUEDE EL CBD AYUDARME A MEJORAR ESOS SÍNTOMAS?
Seguramente muchas de vosotras, las que alguna vez hayáis consumido cannabis y sobre todo las consumidoras habituales, ya hayáis descubierto que esta planta maravillosa es una compañera ideal cuando los síntomas menstruales aparecen, debido a sus efectos relajantes y analgésicos.

Como ya sabéis el CBD o cannabidiol es uno de los componentes encontrados de forma natural en la planta de cannabis. A los citados efectos analgésicos se suman las propiedades antiinflamatorias del CBD. Además, es una sustancia que no “coloca”, es segura y eso puede explicar la gran aceptación que está teniendo entre mujeres de todas las edades que buscan una alternativa eficaz contra esos dichosos dolores.
En un estudio llevado a cabo en Australia y publicado en 2019 (2), se entrevistó a 19 mujeres con endometriosis con el objetivo de conocer cuáles eran las principales opciones a las que recurrían para paliar sus dolores menstruales. Los resultados mostraron que el cannabis en general y el aceite de CBD en particular, eran para ellas los métodos más efectivos para reducir el dolor, junto con el calor local, aplicado en la zona pélvica.
Además de para tratar esos molestos calambres, el aceite de CBD nos mejora el ‘mood’ o estado de ánimo, por lo que para muchas de nosotras puede ser efectivo también para hacer más llevadero el síndrome premenstrual. El desequilibrio hormonal juega un papel muy importante en los cambios de humor. El CBD también ayuda a regular el sistema endocrino para que el desequilibrio de nuestras hormonas no tenga tantos efectos negativos.
Otro punto fuerte es que el CBD tiene propiedades ansiolíticas y nos va a venir estupendamente para el manejo del estrés. ¡Ahí es nada! Además con la que está cayendo… Esto puede impactar directamente en la calidad del sueño y todo esto se traduce en una mayor sensación de bienestar.
PERO… ¿DE QUÉ FORMA SE CONSUME? ¿Y LA DOSIS?
Con todos estos beneficios, vamos a darle una oportunidad, ¿no? Pero, ¿cómo lo tomo? Bien, la forma más popular de consumirlo es en forma de aceite. Si ya has leído nuestra entrada de blog de hace unas semanas en el que mencionábamos los diferentes usos alrededor del mundo, sabrás que en España solo está regulando el uso tópico (en la piel) para el aceite de CBD. Pero en países más abiertos y con una legalidad más avanzada, como Canadá o Suiza, las mujeres lo utilizan de forma sublingual, aplicando unas gotitas debajo de la lengua, para aprovechar mejor todos sus beneficios.
Para la dosis, los expertos recomiendan comenzar con una cantidad pequeña e ir aumentando de forma gradual hasta notar la aparición de los efectos.
Cada persona es un mundo, y en cuanto a los aceites ya sabemos que hay muchos factores que intervienen: concentración del aceite, el peso de cada una, el número de gotitas. Escucha a tu cuerpo. Una tendencia muy extendida en Estados Unidos es empezar un diario en el que se va apuntando las dosis, las sensaciones generales, el nivel de alivio de los síntomas y los posibles efectos adversos.

Muchas mujeres utilizan el aceite de CBD en dosis pequeñas dosis durante todo el mes para evitar los picos fuertes de dolor. Otra tendencia bastante habitual es comenzar con el aceite al menos una semana antes de tener la menstruación, aumentando las gotas conforme pasan los días. Parece ser que esta forma de utilizar el aceite es más efectiva para mitigar los dolores, porque siempre será más difícil calmar un dolor agudo y fuerte.
El aceite de CBD nos ha ayudado, a las mujeres que lo hemos probado, a aliviar los síntomas menstruales de una manera natural, reduciendo el dolor abdominal y las migrañas, regulando los cambios de humor y ayudándonos a dormir mejor. En definitiva, a hacer vida normal sin que el dolor nos limite =)
HEMP IS HOPE NOT DOPE
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La información ofrecida o referenciada en este post es sólo para fines educativos
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REFERENCIAS
1. Dysmenorrhea in adolescence (updated February 2013). Progresos Obstet y Ginecol [Internet]. 2014 Dec 1 [cited 2021 Feb 22];57(10):481–5. Available from: http://www.elsevier.es/es-revista-progresos-obstetricia-ginecologia-151-articulo-dismenorrea-adolescencia-actualizado-febrero-2013–S0304501314001757
2. Armour M, Sinclair J, Chalmers KJ, Smith CA. Self-management strategies amongst Australian women with endometriosis: A national online survey. Vol. 19, BMC Complementary and Alternative Medicine. BioMed Central Ltd.; 2019.
3. Cannabis and Birth Control: What You Need to Know | NHS [Internet]. [cited 2021 Feb 22]. Available from: https://naturalhealthservices.ca/cannabis-and-birth-control-what-you-need-to-know/
4. Labhsetwar AP. Prostaglandins and the reproductive cycle. Fed Proc. 1974;33(1):61–77.
5. Atalay S, Jarocka-Karpowicz I, Skrzydlewska E. antioxidants Antioxidative and Anti-Inflammatory Properties of Cannabidiol. [cited 2021 Feb 21]; Available from: www.mdpi.com/journal/antioxidants
6. Grandi G, Ferrari S, Xholli A, Cannoletta M, Palma F, Romani C, et al. Prevalence of menstrual pain in young women: What is dysmenorrhea? J Pain Res. 2012;5:169–74.
7. Haroutounian S, Ratz Y, Ginosar Y, Furmanov K, Saifi F, Meidan R, et al. The Effect of Medicinal Cannabis on Pain and Quality-of-Life Outcomes in Chronic Pain: A Prospective Open-label Study. Vol. 32, Clinical Journal of Pain. Lippincott Williams and Wilkins; 2016. p. 1036–43.
8. Larsen C, Shahinas J. Dosage, Efficacy and Safety of Cannabidiol Administration in Adults: A Systematic Review of Human Trials. J Clin Med Res. 2020;12(3):129–41.
9. CBD Dosage – How Much CBD Oil Should I Take? | CBD Oil Review [Internet]. [cited 2020 Apr 26]. Available from: https://cbdoilreview.org/cbd-cannabidiol/cbd-dosage/